Michael Mansilla
05.06.2024
Desde el 15 de mayo, Nueva Caledonia, un territorio francés en el Pacífico Sur, se ha visto envuelta en una serie de disturbios que han resultado en la muerte de seis personas y la declaración de un estado de emergencia. Los enfrentamientos han sido provocados por una controvertida reforma del censo electoral, que amenaza con relegar a la minoría a los Kanaks, la población aborigen del territorio.
La ola de violencia ha dejado un saldo de seis fallecidos, incluyendo cuatro civiles y dos gendarmes, y ha llevado a cientos de arrestos. Aproximadamente 400 edificios industriales y comerciales han sufrido daños significativos, especialmente en la capital, Numea, y sus alrededores.
En respuesta, el Gobierno francés ha desplegado temporalmente un contingente adicional de gendarmes y militares para proteger los edificios públicos, los centros comerciales y las explotaciones mineras de Nueva Caledonia durante el estado de emergencia. Este despliegue se produce tras los disturbios que han dejado seis muertos, 240 detenciones y numerosos comercios y vehículos incendiados.
La tensión se intensificó tras la aprobación de una reforma constitucional congreso francés (Cuando la Asamblea y el Senado se reúnen excepcionalmente en Versalles), el pasado 15 de mayo, que expande el cuerpo electoral de Nueva Caledonia. Los independentistas, conocidos como 'canacos', ven esta medida como un perjuicio, ya que incorpora a nuevos votantes provenientes de la Francia continental.
La comunidad internacional ha reaccionado de diversas maneras ante la crisis en Nueva Caledonia. Algunos de los puntos destacados son:
Cierre de TikTok y despliegue militar: El presidente francés Macron ha tomado medidas drásticas como cerrar TikTok y desplegar al ejército, además de acusar a Azerbaiyán de estar detrás de la revuelta.
Llamados al consenso: Líderes tanto independentistas como aquellos a favor de mantener la unión con Francia han destacado la necesidad de consenso y reconstrucción en el archipiélago.
Viaje de urgencia de Macron: El presidente Macron viajó de urgencia a Nueva Caledonia el 23 de mayo para tratar de contener la crisis, pero su visita fue breve y enfrentó protestas y cuestionamientos.
Evacuación de turistas: Se ha iniciado la evacuación de turistas debido a las violentas protestas, lo que indica la gravedad de la situación.
Nueva Caledonia: Entre la Tensión y la Identidad.
El Gobierno Francés ha enviado un millar de militares y gendarmes para reforzar a los 1.700 ya presentes en el territorio, colocando bajo protección militar el aeropuerto internacional y los puertos. El aeropuerto internacional de La Tontouta, a unos 45 kilómetros de Numea, permaneció cerrado al tráfico comercial durante casi una semana. Mientras tanto, tanquetas y vehículos blindados patrullan los barrios kanakos de Numea.
En un contexto donde "cualquier elección sería inevitablemente impugnada, atacada y sin duda cancelada", este proyecto de ley es fuertemente cuestionado por los separatistas, quienes lo ven como un riesgo de "minorizar aún más al pueblo indígena canaco". La diputada ecologista Sabrina Sebaihi ha retomado esta acusación, estimando que con este proyecto de ley "los leales" salen favorecidos incluso antes de que finalice el proceso.
Nueva Caledonia, una Territorio francés, es un archipiélago centrado en una gran isla principal de 400 km, equidistante entre Australia y Nueva Zelanda. Con 304.167 habitantes, la mayoría ciudadanos franceses, se distingue de otros territorios de ultramar por ser un gran productor de minerales, con un comercio exterior vinculado a China, Australia y el sudeste asiático.
Pero el costo de vida es muy alto. Prácticamente todo lo que consume es importado. La huerta produce cocos, verduras, frutas, maíz, carne de res, cerdo, huevos, ñame, plátanos, mangos/guayabas, pero gastronomía kanaka y la francesa difieren mucho. La carne de cerdo es la principal fuente de proteínas de los canacos. Los franceses consumen carne bovina y gran cantidad de productos lácteos que deben importar. Los canacos tienen intolerancia a la lactosa.
A pesar de un PIB significativo y un ingreso per cápita superior al de Nueva Zelanda, pero la riqueza no está bien distribuida, el alto costo de vida, la dependencia de importaciones y el costo del flete marcan la economía local. Las exportaciones (1.920 millones de euros) casi exclusivamente minerales en bruto no superan las importaciones la superan en 2.260 mil millones de euros.
Pero los ingresos procedentes del turismo reciente ocupan un sitio cada vez importante en la economía local, junto con los intercambios financieros con Francia.
Colonizada por París desde 1853, las reformas y el proceso de descolonización han estado en marcha durante un cuarto de siglo. El "Acuerdo de Numea" de 1998, firmado por el entonces primer ministro Lionel Jospin, prevé la devolución de poderes, la definición de una ciudadanía específica y la posibilidad de celebrar referendos sobre la libre determinación. Entre 2018 y 2020, se realizaron referendos donde los votantes rechazaron la independencia en tres ocasiones, aunque en 2020 el "sí" alcanzó un 47%.
El voto no se divide estrictamente según las categorías étnicas. Esta división política no siempre se corta con un cuchillo; Hay zonas grises. La clasificación étnica de Nueva Caledonia es diversa, con un 41% de kanakos y un 27,1% de europeos, entre otros. La división política no es estricta y hay zonas grises y excepciones. Por ejemplo, aunque hay un 41% de canacos, el "sí" a la independencia aumentó al 47% en el referéndum de 2020.
Electorado congelado. El electorado de Nueva Caledonia está "congelado" desde el acuerdo de 1998, privando hoy del voto a 42.596 personas, una quinta parte de los electores inscritos en las listas electorales generales. "Las personas nacidas en Nueva Caledonia, o que residen allí desde hace muchos años, están privadas del derecho de voto", explicó Gabriel Attal, representante pro-metropolitana.
El Supremo Tribunal Constitucional francés declaró ilegal el acuerdo de 1998, afirmando que no se puede negar el derecho de sufragio a ningún ciudadano francés en territorios o dependencias de ultramar incorporados a la república.
¿Quién es quién?
Kanaco 39,1%, (41% 2021) europeo 27,1%, wallisiano, futuniano 8,2%, tahitiano 2,1%, indonesio 1,4%, ni-vanuatu 1%, vietnamita 0,9%, otros 17,7%, no especificado 2,5% (est. 2014), de los territorios franceses del Indico y el Caribe. Nueva Caledonia es una sociedad multiétnica. CIA WORLD FACT.
Caloches y Kanakos. Por un lado, están los indígenas, conocidos como canacos, de origen melanesio. Estaban allí cuando llegaron los franceses, a mediados del siglo XIX. Todavía en desventaja económica, la mayoría de ellos están ahora a favor de la independencia.
Por otro lado, están los descendientes de colonos europeos, conocidos como los caldoches, a veces mestizos, a veces no, la mayoría de las veces leales y apegados a París. A estos los que se unieron europeos de origen más reciente, que se habían ido a establecerse allí, como otros inmigrantes.
Pobreza intergeneracional de los Kanaks.
La pobreza de los kanaks es persistente, fruto de una dependencia del estado de bienestar social francés. Cupones para la alimentación, medicina y educación gratis, universidad de libre acceso, subsidio de desempleo han creado generaciones de canacos que se esfuerzan poco en consolidarse profesional y económicamente., lo que se traduce en 800 millones de euros proveniente de las arcas de la metrópolis.
Genocidio por sustitución.
Estamos presenciando un enfrentamiento entre dos concepciones del futuro del territorio y de la identidad de su pueblo. El gobierno de París ha iniciado un programa de recolonización, enviando inmigrantes ilegales o flojos de papeles a cambio de residencia y permisos de trabajo, principalmente magrebíes y subsaharianos africanos, y más recientemente migrantes de Medio Oriente. En Numea, proliferan las mezquitas.
La estrategia incluye el traslado voluntario de funcionarios públicos de la metrópolis con sueldos compensados por la lejanía, y la creación de empleos públicos innecesarios para los Kanaks para asegurar su la fidelidad a la República Francesa.
La clasificación étnica de Nueva Caledonia es diversa, con un 39,1% de kanakos y un 27,1% de europeos, entre otros. La división política no es estricta y hay zonas grises y excepciones. Por ejemplo, aunque hay un 41% de canacos, el "sí" a la independencia aumentó al 47% en el referéndum de 2020.
La reforma liderada por Emmanuel Macron busca extender la "ciudadanía local" y el derecho al voto a al menos 25.000 personas que han vivido allí más de diez años, lo que representa entre el 15 y el 20 % del padrón electoral. Esto se debe a que el Acuerdo de Numea contenía una cláusula que "congelaba" y limitaba el derecho de voto a las poblaciones presentes en el territorio después de 1998 y a sus hijos.
Estos datos son estimaciones de agencias privadas. El censo en Francia prohíbe discriminar por origen étnico, religión u orientación sexual.
Nueva Caledonia: La Encrucijada de una Identidad en Crisis.
La crisis actual en Nueva Caledonia se desencadenó por una revisión legislativa y constitucional en París, que ha provocado la indignación de los separatistas canacos. Aunque los partidos políticos independentistas, como el Frente Canaco y el Frente Socialista de Liberación Nacional (FLNKS), no respaldan las manifestaciones violentas, es evidente que existe un sector radical significativo en las calles de Numea que ignora a los líderes políticos.
La revisión en curso en París, pendiente de sanción constitucional por el "Congreso" reunido en Versalles, busca específicamente abolir una cláusula que limita el electorado. Propone ampliar el electorado de Nueva Caledonia para las elecciones locales a todos los ciudadanos que hayan residido allí al menos diez años. Los separatistas se oponen a esta medida, temiendo que diluya la influencia electoral de los canacos y erosione gradualmente la población autóctona. Ven la inmigración y el otorgamiento del derecho al voto a los inmigrantes como una amenaza política, incluso fatal, temiendo ser relegados a una minoría en su propio país.
Nueva Caledonia, supervisada por el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas, tiene un estatus único de colectividad sui géneris, distinto al de las colectividades de ultramar como la Polinesia Francesa y Wallis y Futuna. Su posición intermedia entre un país independiente y un departamento de ultramar francés se refleja en su Congreso y gobierno autónomos, con competencias en impuestos, leyes laborales, salud y comercio exterior. El Acuerdo de Numea otorgó a Nueva Caledonia un estatus especial dentro de la República Francesa. Aunque el franco CFP es la moneda oficial, el euro y el dólar australiano son las monedas de uso corrientes.
La economía de Nueva Caledonia se basa en la minería del níquel, siendo el tercer productor mundial y poseyendo el 25% de las reservas globales. Sus exportaciones, centradas en minerales como cromo, hierro, cobalto, manganeso, plata, oro, plomo y cobre, tienen como principales socios a China, Corea del Sur, Japón, Taiwán y España. A pesar de un PIB significativo y un ingreso per cápita superior al de Nueva Zelanda, el alto costo de vida y la dependencia de importaciones marcan la economía local.
Las disparidades sociales son pronunciadas, con los canacos viviendo con un nivel de vida medio que es la mitad del de los no canacos. El acceso desigual al empleo y la vivienda, y un desempleo elevado entre los canacos, contrastan con la media del archipiélago
El Comité de Descolonización de la ONU sostiene que Nueva Caledonia no está lista para la independencia y requeriría al menos una década de preparación.
No hay suficientes médicos de origen local, ni forma de pagarle 72.000. euros de sueldo más otras extras para que permanezcan en las islas. Su economía se basa en la exportación de minerales sin procesar, pendiente de los precios internacionales. Para una posible independencia, Nueva Caledonia debería tener una industria siderúrgica, le de valor agregado a las exportaciones, un mayor desarrollo de la agricultura intensiva y creación de fábricas de alimentos locales. Pero debe apostarle mucho a la educación técnica y universitaria. En caso de una independencia a muy corto plazo el nuevo país, Nueva Caledonia se convertiría en un estado fallido.
El 29 de mayo se levantó el estado de emergencia.
Michael Mansilla
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias