sábado, 13 de julio de 2024


 


EL GRAN MOVIMIENTO DE IDAHO: LA PROFUNDA DIVISIÓN DE LOS ESTADOUNIDENSES

Michael Mansilla.


04.07.2024

En las zonas rurales de Oregón, los votantes, cansados del giro hacia la izquierda de su estado, han adoptado una idea simple y extravagante: ¿Qué pasaría si simplemente fuéramos parte de Idaho?

En el verano de 2015, un deshollinador en Elgin, Oregón, redibujó el mapa del oeste americano. "Imagínese por un momento que la frontera occidental de Idaho se extiende hasta el Océano Pacífico", escribió Grant Darrow en una carta al editor de su periódico local. Insistió en que el Oregón rural debería romper sus vínculos con los habitantes urbanos de Portland y los liberales de Salem para unirse a Idaho.

"La diversidad política en este estado se está volviendo desagradable", argumentó. "Los habitantes de las zonas rurales de Oregón en general y los del este de Oregón en particular están cada vez más consternados por la manera en que la Legislatura de Oregón y los habitantes urbanos de Oregón han marginado sus valores, demonizado su estilo de vida, villanizado sus medios de vida basados en recursos y clasificado como ciudadanos de segunda clase".

El Movimiento Gran Idaho: Un Fenómeno Político, Económico y Sociocultural.

El Movimiento Gran Idaho es un fenómeno político y sociocultural que se centra en la idea de redefinir las fronteras estatales para reflejar mejor las identidades ideológicas y culturales de varias regiones limítrofes al estado de Idaho. Este movimiento, defendido principalmente por un grupo de residentes del este de Oregón, busca expandir las fronteras de Idaho hacia el oeste para incluir una porción sustancial de la zona rural de Oregón, que comparte afinidades con el Partido Republicano.

El movimiento se ha difundido, y varios condados del norte de California y el este de Washington se han unido a la causa. Los votantes de 14 condados rurales y conservadores aprobaron entre 2023 y 2024, mediante plebiscito, medidas que iniciarían el proceso de separación del estado azul de Oregón para unirse a Idaho, un estado dominado por los republicanos.

 

Matt McCaw, líder del Movimiento Gran Idaho, explica la candidatura de Oregón para unirse a Idaho. El Movimiento Gran Idaho plantea cuestiones importantes sobre la identidad regional y la representación política en los Estados Unidos. A medida que los residentes rurales buscan una voz más fuerte en la toma de decisiones, las fronteras estatales se convierten en un tema candente que merece atención y debate.

 El Contexto Geográfico y Económico.

Los 14 condados del este de Oregón sumados al proyecto Gran Idaho tienen una población de unos 384,000 habitantes, solo el 9 % de la población del estado de Oregón, pero el 62 % de su superficie. Desde la costa hasta la mitad de Oregón y Washington se extiende la Cordillera de las Cascadas, una región boscosa y húmeda con precipitaciones anuales de hasta más de 2,000 milímetros. Allí están las ciudades Portland y Seattle, con 300 días de precipitaciones al año. Esa es la zona industrial y tecnológica, con sedes de empresas como Microsoft y Boeing. Hacia el este se extiende el Oregón rural.

Más allá de la Cordillera de las Cascadas, la población disminuye con la elevación y el terreno cambia desde las montañas húmedas de la costa. El clima se vuelve más continental y seco, y allí prospera la ganadería, las industrias forestales y la agricultura de regadío, especialmente el cultivo de trigo y patatas.

Garrett Mahón, residente de Wallowa, expresó: "Nuestra forma de vida aquí se basa en la agricultura, la silvicultura y la madera. Es una economía centrada en los recursos naturales, y parece que el lado occidental de Oregón nos trata como su patio de recreo". Durante los últimos 50 años, el Partido Demócrata ha gobernado todo el estado, mientras que los republicanos han mantenido un control casi continuo en los condados del este de Oregón.

La Divisoria Ideológica.

Matt McCaw es el director ejecutivo del movimiento que tiene como objetivo desplazar la frontera de Oregón 200 millas al oeste. Este esfuerzo, conocido como The Greater Idaho Movement, busca realinear 14 condados bajo la jurisdicción de Idaho. McCaw explicó que el movimiento surgió para hacer frente al creciente "tira y afloja" dentro del estado del noroeste del Pacífico.

 

"Oregón está dividido geográficamente por la Cordillera de las Cascadas, lo que crea una división cultural significativa", dijo McCaw. "El lado oeste de Oregón es más urbano, con un clima, una economía y una cultura diferentes en comparación con el lado este, conservador y agrícola".

McCaw sugiere que, independientemente del partido en el poder, actualmente los demócratas, imponen sus valores y políticas a las personas que viven a cientos de kilómetros de distancia. Los organizadores del Movimiento Gran Idaho argumentan que los habitantes del este de Oregón se sienten alienados por las políticas progresistas del estado, a las que culpan de las altas tasas de criminalidad.

Afirman que unirse a Idaho ofrecería impuestos más bajos y una mejor representación. McCaw citó la pandemia de COVID-19 como ejemplo, durante la cual dijo que las políticas extremas de Oregón se impusieron a los residentes que no estaban dispuestos. "El estado impuso mandatos de máscaras, cerró negocios, iglesias y escuelas, y luego introdujo mandatos de vacunación", dijo.

 El Movimiento Gana Terreno.

 El condado de Crook recientemente se convirtió en el último en aprobar la 'Medida del Gran Idaho' con la aprobación de la Medida 7-86 por el 53%. Esta votación, aunque no es legalmente vinculante, muestra el apoyo a informar a los representantes estatales y federales sobre el deseo de negociar la anexión de parte de Oregón. McCaw señaló: "Los votantes del este de Oregón han hablado alto y claro sobre su deseo de conversaciones fronterizas". Instó al gobernador, al presidente de la Cámara de Representantes y al presidente del Senado a discutir los próximos pasos para cambiar la gobernanza de los habitantes del este de Oregón.

 

El congresista Mike McCarter agregó: "Durante los últimos tres años, hemos estado preguntando a los votantes qué quieren para su gobierno estatal. Nos están diciendo a través de estos votos que quieren que sus líderes muevan la frontera. En nuestro sistema, el pueblo está a cargo, y es hora de que sus representantes lo cumplan".

 Desafíos Legales y Políticos.

Oregón se enfrentó a la agitación después de que se introdujera la controvertida Medida 110 en 2021, que eliminó las sanciones penales por posesión de drogas duras como la cocaína, mientras que la marihuana es totalmente legal en todo Oregón. Pero no en Idaho. La medida, que imponía una multa de 100 dólares que podía ser eximida llamando a una línea directa de tratamiento, resultó ineficaz. Más del 95 por ciento de las multas fueron ignoradas, y de las 4,000 citaciones emitidas, solo 40 personas llamaron a la línea directa.

Varias leyes estatales difieren drásticamente entre Oregón e Idaho. El acceso al aborto es marcadamente diferente: Idaho prohíbe casi todos los abortos, mientras que Oregón no impone restricciones legales. La política fiscal también es diferente, ya que Idaho cobra un impuesto sobre las ventas del 6 %, mientras que Oregón no impone un impuesto estatal sobre las ventas. El salario mínimo también difiere entre los dos estados.

¿Qué Dice la Constitución?

 

Según el Artículo IV, Sección 3 de la Constitución de los Estados Unidos:

"El Congreso podrá admitir nuevos Estados en esta Unión; pero no se formarán ni erigirá ningún Estado nuevo dentro de la jurisdicción de ningún otro Estado; ni se formará Estado alguno por la unión de dos o más Estados o partes de Estados, sin el consentimiento de las Legislaturas de los Estados interesados, así como del Congreso".

La palabra sobre este movimiento se ha difundido, y varios condados del norte de California y el este de Washington se han unido a la causa. Los votantes de 14 condados rurales y conservadores aprobaron entre 2023 y 2024, mediante plebiscito, medidas que iniciarían el proceso de separación del estado.

 

McCaw señaló: "Los votantes del este de Oregón han hablado alto y claro sobre su deseo de conversaciones fronterizas". Instó al gobernador, al presidente de la Cámara de Representantes y al presidente del Senado a discutir los próximos pasos para cambiar la gobernanza de los habitantes del este de Oregón.

El Territorio de Oregón: La Historia detrás de las Actuales Fronteras Estadounidenses.

La historia detrás de las fronteras actuales de los estados estadounidenses es fascinante. Antes de convertirse en estados, los territorios eran en su mayoría "terra incógnita", con mapas incompletos y variados. Observando un mapa, parece que las fronteras fueron trazadas con regla y escuadra, y efectivamente, se utilizaron latitud y longitud para demarcarlas. Hasta la llegada de los satélites en el siglo XX, Estados Unidos no había completado la cartografía de su parte continental.

 El Territorio de Oregón era el nombre con el que se conocía la región del noroeste de América del Norte, situada al oeste de las Montañas Rocosas hasta el Océano Pacífico. Aproximadamente, este territorio está ahora dividido entre la provincia canadiense de Columbia Británica y los estados estadounidenses de Oregón, Washington e Idaho, así como partes de Montana y Wyoming.

El conflicto entre Gran Bretaña y Estados Unidos se resolvió de forma pacífica, mediante la Convención Angloestadounidense de 1818, ambos países ejercieron un condominio sobre el Territorio de Oregón, asegurando además la inhibición de posibles reivindicaciones mexicanas o rusas. A partir de 1841, con la aparición de la doctrina del Destino Manifiesto (hacia 1845), grupos y caravanas organizadas con cientos de colonos, ganaderos, agricultores, mineros y hombres de negocios comenzaron a recorrer la pista o "camino de Oregón". Estos caminos al oeste del río Misisipi cubrían unos 3200 km, y los utilizaron los que emigraban hacia el Pacífico Noroeste.Viajaban en caravanas, carretas, carros, a caballo, a pie, en balsa y en barco, para establecer nuevas granjas, vidas y empresas en el Territorio de Oregón, que desde 1818 estaba administrado conjuntamente por Estados Unidos y Gran Bretaña. El uso de la ruta alcanzó su clímax con el descubrimiento de oro en California en 1848. Desde el principio, se prohibió el asentamiento de mexicanos, rusos y negros para evitar problemas relacionados con el abolicionismo.

 

En 1843, los colonos establecieron su propio gobierno, llamado "Gobierno Provisional de Oregón". Una comisión legislativa redactó un código de leyes conocido como la Ley Orgánica, que incluía la creación de un comité ejecutivo de tres personas, un poder judicial, una milicia, leyes de la tierra y cuatro condados. Hubo vaguedad y confusión sobre la naturaleza de la Ley Orgánica de 1843, en particular si era constitucional o legal. En 1844, una nueva comisión legislativa decidió considerarlo legal. La Ley Orgánica de 1845 hizo cambios adicionales, incluyendo el permiso de participación de súbditos británicos en el gobierno. Ante la perspectiva de que se formara un nuevo país, se aceleró la partición del territorio.

 En 1846, se establecieron los límites entre el dominio británico de la Columbia Británica y el Territorio de Oregón estadounidense por medio del Tratado de Oregón, que fijó los límites de las jurisdicciones entre Gran Bretaña y Estados Unidos siguiendo el paralelo 49.

Cascadia: La Respuesta al Gran Idaho.

Cascadia es una región geográfica y cultural en la costa noroeste de América del Norte. Aunque no existe una frontera oficial, se acepta que su extensión incluye los estados estadounidenses de Washington y Oregón, así como la provincia canadiense de Columbia Británica.

La idea de Cascadia se remonta al siglo XIX. El expresidente de Estados Unidos, Thomas Jefferson, concibió la creación de una nueva nación independiente en.

América del Norte, ubicada en la costa del Pacífico. Aunque esta idea original no se materializó, Cascadia sigue siendo relevante hoy en día, especialmente con el surgimiento del movimiento del "Gran Estado de Idaho".

 

 La propuesta de unificar estas regiones bajo una identidad común de Cascadia ha surgido como una respuesta a movimientos como el Gran Idaho, que busca redefinir las fronteras estatales para reflejar mejor las identidades ideológicas y culturales de las distintas regiones. Este tipo de movimientos subraya la continua evolución y debate sobre la identidad regional y la representación política en América del Norte.

Movimientos como "Cascadia Now" abogan por esta región como una nación utópica basada en valores ecológicos y respeto a las culturas indígenas. Cascadia no es solo una idea política, sino también una biorregión cuya diversidad natural y cultural la hace única. Aunque sus límites son imprecisos, las personas sienten un fuerte sentido de identidad con esta región, compartiendo valores como la sostenibilidad y la conexión con la tierra.

 

 

 

 

 

 

La idea de Cascadia se remonta al siglo XIX. El expresidente de Estados Unidos, Thomas Jefferson, concibió la creación de una nueva nación independiente en América del Norte, ubicada en la costa del Pacífico. Aunque esta idea original no se materializó, Cascadia sigue siendo relevante hoy en día, especialmente con el surgimiento del movimiento del "Gran Estado de Idaho".

 Movimientos como "Cascadia Now" abogan por esta región como una nación utópica basada en valores ecológicos y respeto a las culturas indígenas. Cascadia no es solo una idea política, sino también una biorregión cuya diversidad natural y cultural la hace única. Aunque sus límites son imprecisos, las personas sienten un fuerte sentido de identidad con esta región, compartiendo valores como la sostenibilidad y la conexión con la tierra.

El Movimiento del Gran Idaho: Fronteras, Valores y Frustraciones en Oregón

Decenas de miles de residentes rurales y conservadores del este de Oregón están experimentando una creciente frustración con sus vecinos urbanos liberales del oeste de Oregón. La tensión ha llegado al punto en que algunos consideran que ya no pueden compartir ni siquiera un código postal.

El esfuerzo por trasladar la frontera de Idaho hacia el este de Oregón busca alinear a las comunidades agrícolas, ganaderas y madereras conservadoras del este con el vecino estado de Idaho, que comparte ideas afines. Aunque la medida no es vinculante, 14 condados en el este de Oregón ya han aprobado el plan en las urnas, lo que sirve como un termómetro de la creciente insatisfacción.

Josh Derrick, propietario de dos tiendas minoristas en la calle principal de Prineville, expresó su descontento: "Amo Oregón, pero no amo a la gente que lo dirige ahora". Este sentimiento se ha propagado entre los habitantes del este de Oregón, quienes citan dictados legislativos liberales en la capital estatal de Salem y en el centro de población de Portland. Entre las preocupaciones se encuentran el aumento del consumo de drogas, los esfuerzos para reducir el uso de combustibles fósiles y las medidas de control de armas.

Derrick, partidario de la secesión, cree que las diferencias fundamentales en el estilo de vida indican una falta de puntos en común. Derrick vende vehículos, sobre todo del tipo que requiere una camioneta grande para remolcar. "El este de Oregón es una tierra de geografía dura, caminos de tierra y población muy dispersa". Sin embargo, como concesionario, también tiene a mano modelos más pequeños y está al tanto de la creciente popularidad de los automóviles eléctricos. "Esta es tierra de Dodge RAM y la radio civil, algo más confiable que la recepción de internet".

Derrick se involucró en la política local cuando el movimiento del Gran Idaho llamó su atención. "Me encanta Oregón. Las posibilidades de que la iniciativa salga adelante son bastante escasas. Pero está involucrando a mucha más gente en la política", dijo. "Si esto involucra a más gente, lo considero una victoria".

 Opina que los estadounidenses están demasiado divididos y que, aunque las personas que no están de acuerdo pueden vivir juntas, los políticos liberales de Oregón imponen sistemáticamente sus valores en las zonas rurales. Si otros estados deciden hacer lo mismo, que así sea; existe un proceso para cambiar los límites por esta misma razón. "No creo que podamos mantener el camino en el que estamos", concluyó Derrick. "Necesitamos estar bien diciendo que sus valores son los suyos, los míos son míos, y deben respetar nuestra capacidad de tener puntos de vista diferentes".

Prineville, Oregón, es la sede del condado de Crook, donde los residentes desean que la frontera de Oregón se desplace hacia el oeste para que el área forme parte de Idaho.

 

"Se supone que somos un pueblo pequeño. Ese es el punto", dijo J.G. Halcom, miembro del movimiento, quien se preocupa por criar a sus hijos en lo que considera un ambiente cada vez más liberal. "Ese es el tipo de cosas por las que nos mudamos aquí".

En general, el este de Oregón tiene más en común con Idaho que la mayor parte de su propio estado: es menos diverso racialmente (con una población mayoritariamente blanca) que Oregón en su conjunto, y las personas que viven allí ganan menos dinero que el promedio estatal. El ingreso familiar medio es de aproximadamente $75,000, mientras que en Idaho es de aproximadamente $70,000 y en todo el estado de Oregón es casi $87,000.

 

Seth Crawford, comisionado del condado de Crook, comentó: "El dueño del molino y el trabajador del molino tienen que ir al mismo restaurante y comprar en el mismo supermercado. Eso mantiene las cosas bajo control". Aunque no ha adoptado una posición formal sobre la propuesta de cambio de frontera, comprende por qué muchos de sus vecinos la apoyan. Durante sus campañas electorales, ha llamado a cientos de puertas de sus vecinos y ha escuchado regularmente las mismas preocupaciones, desde la legalización de la marihuana en todo el estado (a la que se opuso el condado de Crook) hasta quejas sobre cómo los legisladores quieren regular las armas. "La gente también está frustrada por pagar impuestos más altos para financiar servicios gubernamentales a los que se oponen y quieren la libertad de criar a sus familias según sus propios valores".

 

Aunque cree que el condado de Crook puede hacer oír su voz en la cámara estatal, comprende por qué sus vecinos podrían estar dispuestos a tomar la drástica medida de la secesión. "Quieren poder enviar un mensaje a Salem: no estamos contentos con la situación en la que nos encontramos", dijo Crawford.

 

Opina que los estadounidenses están demasiado divididos y que, aunque las personas que no están de acuerdo pueden vivir juntas, los políticos liberales de Oregón imponen sistemáticamente sus valores en las zonas rurales. Si otros estados deciden hacer lo mismo, que así sea; existe un proceso para cambiar los límites por esta misma razón. "No creo que podamos mantener el camino en el que estamos", concluyó Derrick. "Necesitamos estar bien diciendo que sus valores son los suyos, los míos son míos, y deben respetar nuestra capacidad de tener puntos de vista diferentes".

 

"La gente ya se ha clasificado en comunidades con ideas afines", añadió Matt McCaw, portavoz del movimiento del Gran Idaho. "A la gente le gusta vivir rodeada de personas que comparten los mismos valores que ellos".

 

No todos en el este de Oregón están a favor de la secesión. El debate ha dividido a la comunidad. Amigos y vecinos se han enemistado, y la tensión está presente en la sala de deliberaciones.

Habría recortes en el salario mínimo, señaló a sus vecinos, y un nuevo impuesto estatal sobre las ventas y una posible caída en el valor de las viviendas si se unieran a Idaho.

 

En junio de 2023, el condado de Wallowa se convirtió en el duodécimo en aprobar una iniciativa electoral en apoyo de unirse a Idaho. Con anterioridad, es costumbre de estas pequeñas localidades hacer una asamblea abierta donde cualquier habitante puede tomar la palabra. Dijeron que temían lo que sucedería si perdieran el acceso al derecho al aborto, la cobertura de atención médica, la financiación de infraestructura, el voto por correo y la marihuana. Algunos de ellos dijeron que, si bien no nacieron en Oregón, han vivido en el estado la mayor parte de los años. Son oregonianos y quieren seguir siendo oregonianos.

La sala estaba dividida, al igual que el condado. Pero como en otros pueblos pequeños de Estados Unidos, la gente se conocía y saludaba. Sin embargo, este debate ha enemistado a viejos amigos y vecinos y ha puesto tensión en la comunidad. Los secesionistas ganaron por sólo siete votos de los 3,497 emitidos.

Tensiones y Divisiones.

Una división de Oregón significaría nuevas estructuras impositivas, una transferencia de deudas públicas, la pérdida de parques estatales y recursos naturales, y un cambio fundamental en los beneficios de los programas sociales. Los detalles podrían tardar años en resolverse, pero eso es un problema para el futuro, dicen los partidarios. Ahora, solo quieren que los dos estados comiencen a hablar sobre una transición.

Esta es una de las últimas versiones de un debate sobre la representación política de las minorías que es tan antiguo como la fundación de esta nación. La Constitución de Estados Unidos fue escrita para fomentar el consenso, dijo; "la Guerra Revolucionaria se libró porque a la gente se le cobraban impuestos, pero no se la escuchaba". "¿No es ese nuestro mensaje?", preguntó Seth Crawford.

 Y aunque puede que no adopte puntos de vista racistas, el movimiento cuenta con el apoyo de nacionalistas blancos y líderes de milicias como Ammon Bundy, Nacion Aria remontándose a la fundación racista de Oregón, cuando a los negros se les prohibió asentarse en la tierra. Entre los 14 condados que podrían formar parte del Gran Idaho, todos menos tres tienen poblaciones blancas superiores al 75%, según cifras del censo.

 ¿Podrá aprobarse en las legislaturas de Idaho y Oregón?

 Cuando la representante estatal republicana de Idaho, Barbara Ehardt, se enteró por primera vez del movimiento de Oregón para unirse a su estado, simplemente resonó en ella. ¿Por qué Idaho no estaría interesado en más tierras, más recursos como madera, minerales y agua, y más personas con ideas afines? ella preguntó.

 

"Solo se puede presionar a la gente hasta cierto punto, exigiéndoles que acepten algunos de sus caprichos no constitucionales antes de que la gente responda", dijo Ehardt. En febrero de 2023, la Cámara de Representantes de Idaho aprobó su proyecto de ley para abrir un diálogo interestatal formal con Oregón para asegurar a aquellos condados que quieran sesionarse. Aunque no avanzó en el Senado, Ehardt tiene "esperanzas y optimismo" de poder lograr que su proyecto de ley sea aprobado en ambos cuerpos legislativos el próximo año. Para que esto tenga éxito, "será necesaria la mano del Señor". Su proyecto de ley murió en el comité del senado de Idaho a principios de este año.

Si bien está "1000% de acuerdo" con las razones por las cuales la gente está tan frustrada con las políticas que surgen de Salem, la representante estatal republicana, Emily McIntire, se preocupa por los habitantes del este de Oregón que tienen atención médica, cuidado infantil, cupones de alimentos y otros servicios estatales superiores a los del resto de estadounidenses. Idaho ofrece, incluido el salario mínimo por hora de Oregón de $14,20 en comparación con los $7,25 de Idaho, el salario mínimo federal.

"Todos los que trabajan en un Walmart en un condado del este accionemos el interruptor, eres parte de Idaho y todo permanece como está". Un Walmart del este de Oregón puede decir: 'Vamos a bajarles a todos ustedes a ocho dólares la hora'", dijo. 

Carga fiscal. Las áreas de altos ingresos alrededor de Portland, en el noroeste de Oregón, soportan la mayor parte de la carga fiscal del estado debido al sistema progresivo de impuesto sobre la renta de Oregón. La región oriental Oregón no es autosuficiente en lo financiero. Si fueran parte de Idaho, este estado tendría que aumentarse los impuestos para presupuesto estatal de Idaho.

Agregar el este de Oregón a Idaho podría costarle unos $170 millones anuales para el presupuesto estatal de Idaho durante años. El movimiento del Gran Idaho recomienda que Oregón le dé a Idaho el 9% de sus activos gubernamentales. Idaho, para no alterar significativamente la posición financiera de Idaho.

En resumen, las consecuencias económicas incluirían impuestos más altos, reducción de salarios y un costo de vida más altos para el este de Oregón si fueran parte de Idaho. Mientras en la capital del estado Salem no se opondrían en desprenderse de su pobre región oriental, en Boise no hay mucho entusiasmo en anexionarse una región que no puede auto mantenerse.

Implicaciones de la División.

La separación de Oregón conllevaría cambios significativos. Nuevas estructuras impositivas, transferencia de deudas públicas y la pérdida de parques estatales y recursos naturales estarían en juego. Los detalles de esta transición podrían llevar años en resolverse, pero los partidarios insisten en que es crucial iniciar el diálogo entre los dos estados.

¿Aprobarán las Legislaturas de Idaho y Oregón?

La representante estatal republicana de Idaho, Barbara Ehardt, ve con interés la posibilidad de expandir su estado. Sin embargo, la representante Emily McIntire, aunque comprende la frustración con las políticas de Salem, se preocupa por los servicios estatales que los habitantes del este de Oregón reciben actualmente. La aprobación de un diálogo interestatal formal sigue siendo incierta, pero la esperanza persiste.

El Movimiento Gran Idaho, no pudo llegar en peor momento. Desde que el gobierno de Canadá presento un plan de contingencia en caso de que se produzcan enfrentamientos armados entre diferentes grupos civiles o Cívico-militares o una Guerra Civil plena, podría redefinirse las fronteras estatales sin mucho tramite, a golpe de fusil.

 

Michael Mansilla

michaelmansillauypress@gmail.com

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